Textos primarios de los libros de Jozef Rulof correspondientes al artículo ‘Psicología’.
Estas fuentes presuponen la lectura previa del artículo ‘Psicología’.
Pensar materialmente
La psicología habla del subconsciente, pero aún no es capaz de captar su profundidad:
Hablan de vida y muerte, sociedad, hablan de conciencia y subconsciencia, universidad, eruditos, teólogos, psicólogos, psiquiatras, pero no se conocen a sí mismos.
Conferencias 3, 1952
La conciencia de la psicología todavía es material.
En la tierra, de vuelta en esta sociedad, se encuentran ustedes ante el ser humano.
El ser humano ha aceptado una tarea, se ha dotado de conciencia, y esta no es más que material.
Todas las artes y ciencias representan esa personalidad, que aquí se siente como material.
Ahora sienten y comprenden que aún tiene que empezar la psicología para el ser humano interior.
El psicólogo todavía nos les puede regalar esas verdades de vida, él mismo aún es inconsciente.
Conferencias 2, 1951
Infundir alma a la materia
La psicología todavía no conoce el alma como sentimiento que se reencarna:
Pero la ciencia dice: “El ser humano como alma aparece por primera vez en la tierra al nacer”.
Ahí estamos.
Tan profunda y consciente es ahora la psicología.
Un psicólogo, si ese hombre es médico, y además, catedrático, se estrella contra un muro, no conoce al ser humano, no se conoce.
Preguntas y respuestas 4, 1952
¿De dónde vienen ustedes?
La universidad, el psicólogo, no cree en la reencarnación.
La criatura que ahora nace en la madre tiene hoy apenas cinco segundos de edad.
La reencarnación no existe.
Preguntas y respuestas 5, 1950
A Jozef Rulof (Jeus) se le explica que el ser humano pregunta en vano al psicólogo cómo está configurado su interior:
El ser humano, Jeus, quiere saberlo todo de otro en la tierra, pero de sí mismo, nada.
Siempre mira a los demás, ve sus errores, pero de sí mismo, nada.
Y yo primero miro qué hay de malo en mí, y después miro a la gente.
Ay, Jeus, ¡puedes aprender de la gente cómo no hay que hacer las cosas!
Y no te costará un centavo.
La gente va adonde un psicólogo para preguntarle a ese hombre cómo son por dentro.
Y por cada uno de los rasgos de carácter sabes lo miserable que sigues siendo, y tampoco para eso necesitas ningún erudito.
Esa gente no se conoce a sí misma.
¡Nuestra escuela, mi Jeus, nos conduce a nosotros mismos!
La cosmología de Jozef Rulof 4, 1944
Cuando los psicólogos hayan llegado a conocer el alma en el otro lado gracias a los maestros podrán ayudar a muchas personas:
Los maestros del otro lado ayudarán a los psicólogos mediante los instrumentos técnicos para informar a la masa.
Los pueblos de la tierra contemplados por el otro lado, 1941
