¿A dónde vamos a parar?
¿A qué esfera tenebrosa o luminosa vamos en el más allá después de morir en la tierra?
El más allá lo forman mundos espirituales separados que en los libros de Jozef Rulof se llaman esferas.
Después de morir en la tierra podemos ir a la esfera que se corresponde con nuestros sentimientos.
Si sentimos amor por nuestros prójimos, podemos ir a una esfera de luz.
Las personas con un interior tenebroso van a parar a una esfera tenebrosa.
Hay esferas que se asemejan a un paisaje terrenal.
Allí viven los habitantes que siguen sintiendo y pensando tal como hacían en la tierra.
Su cuerpo espiritual se parece al cuerpo que tenían en la tierra debido a que aquel se forma sobre la base de sus sentimientos.
Algunas esferas ya no son comparables con la tierra, por haberse desarrollado más los sentimientos de los habitantes.
Al sentir más amor por todo lo que vive han entrado en una esfera de luz más elevada.
Igual que todos los habitantes de las esferas están de camino a la séptima esfera de luz, la más elevada en el más allá de la tierra.
